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La nabilona, un cannabinoide sintético estructuralmente similar al delta-9-THC del cannabis, tiene propiedades antieméticas y se usa para el control de las náuseas y los vómitos asociados con la quimioterapia contra el cáncer en pacientes que no han respondido adecuadamente a los antieméticos convencionales (Martindale). También en la anorexia y pérdida de peso en pacientes con VIH (DrugBank). Administración oral en dos a tres dosis diarias.
A fecha de última actualización no encontramos datos publicados sobre su excreción en leche materna.
Sus datos farmacocinéticos (amplio volumen de distribución y alto porcentaje de fijación a proteínas plasmáticas) hacen poco probable el paso a leche materna en cantidad clínicamente significativa.
La semivida de eliminación de la nabilona es de 2 horas; la de sus metabolitos, que no se sabe si son activos, de 35 horas. (Martindale)
La nabilona no altera los niveles plasmátcos de prolactina. (Mendelson 1984)
Un uso puntal o a la dosis mínima eficaz podría ser compatible con la lactancia vigilando el estado neurológico y de alimentación del lactante.
Hasta conocer más datos publicados sobre este fármaco en relación con la lactancia, pueden ser preferibles alternativas conocidas más seguras, especialmente durante el periodo neonatal y en caso de prematuridad.